Que hombres y mujeres somos iguales, es mentira; somos distintos, muy distintos. Pensamos distinto, nos afectan las cosas de distinta manera, y reaccionamos de modos distintos, y ojo, que no hablo de derechos, que de eso sabe más Donald Trump que yo, aunque ya le llegará a él también la Justicia Divina, que haberla hayla.

Las mujeres leen los folletos de cualquier cosa que compran o van a comprar, así que escribamos bien. Las mujeres ven los colores que los hombres no vemos, así que pintemos bien. Las mujeres sienten lo que nosotros no sentimos, así que cuidado con lo que las hacemos sentir. Las mujeres en general, son mucho más productivas que los hombres, así que seamos sensatos. Las mujeres son mucho más protectoras, así que escuchémoslas más. Las mujeres tienen sus días, nosotros tenemos meses.

Digo todo esto, porque si va a montar un negocio, cuente con la opinión de la persona del otro sexo, la suma de la complejidad y la simplicidad es perfecta para crear, somos cerebros distintos y vemos las mismas cosas, de modos diferentes, eso enriquece cuando el objetivo es compartido.

Hay hombres listos y tontos, mujeres listas y tontas, hombres bajos y altos, mujeres altas y bajas, y así podemos seguir hasta el infinito, el resto son “Trumpcomplejos”. Por cierto, yo soy hombre y tonto, en primera persona del singular.

Como es viernes, no tengo mucho más que decir. Solo deseaos que tengáis buen fin de semana. Mañana escribo pero no comparto, así que si queréis leerlo, ahí estará.

Gracias

Génesis 31, 50

Si maltratas a mis hijas o tomas además de ellas otras mujeres, aunque nadie lo vea, Dios lo verá y nos será testigo.