Pasan los años y da lo mismo, seguimos pensando que los padres son un derecho adquirido de los cuales podemos hacer uso y disfrute libremente y sin ningún tipo de freno, a veces incluso, hasta nos dejamos llevar por la soberbia de esos que piensan que todo está ganado.
Ahora se abre de nuevo la calle, de nuevo podremos volver a ver a nuestros mayores en libertad, pero seguro que muchos de ellos seguirán solos, tan solos, que solos sus amigos y amigas, sus cuidadores o médicos tendrán la certeza de que viven, porque cuando alguien no quiere mirar hacia algún sitio, sencillamente no lo hace.
- ¿Cuánto hace que no llamas a tus padres por puro compromiso?
- ¿Cuánto hace que no te preocupas y te ocupas de lo que a ellos les importa?
- ¿Cuánto haces que no le dices que esa pregunta ya te la hizo ayer?
- ¿Cuánto hace que se te olvidó que los padres son seres humanos como tú y como yo?
Mucho trabajo por hacer, pero es guerra perdida, los padres son “El comodín”, ese comodín para el dinero, para cuidar a nuestros hijos, para escuchar nuestras penas, para vaciar nuestro dolor. ¿Es hora de pensar? ¿Es hora de reflexionar? ¿Por qué?
Porque hoy somos hijos, pero también muchos de nosotros somos y seremos padres, y tal y como tratemos a nuestros padres, así nos tratarán nuestros hijos, así es la vida, en el Management y en la familia, no hacemos lo que nos dicen, hacemos lo que vemos hacer, solo el ejemplo es una luz más fuerte que la palabra.
Todavía estamos a tiempo, pero hoy, denuncio, grito, lloro y pido, por todos aquellos mayores de los que nos hemos olvidado, antes, durante y después de la pandemia, tal vez sea el momento de poner el foco de nuevo en los que nos dieron la vida, en los que pasaron noches en vela, en los que siempre quieren lo mejor para nosotros, en los que nos ven guapos y nos saben listos, esos que nunca fallan, nuestros padres, así que…
”Nosotros mismos”
- Hoy estamos a tiempo de una llamada diaria
- Hoy estamos a tiempo de escucharlos activamente
- Hoy estamos a tiempo de no mirar hacia otro lado mientras nos hablan
- Hoy estamos a tiempo de dejar el móvil en la entrada de su casa mientras comemos con ellos.
Buena vuelta a la vida normal