Nos enfrentamos al segundo roud, y no será el definitivo, entre otras cosas, por nuestra poca cabeza, no puede haber un policía por persona para que nos ponga una mascarilla a cada uno de nosotros. Este segundo envite, va desde ahora mismo hasta marzo, fecha en la que creo nos llegarán las primeras unidades de la vacuna del Covid, luego la lenta y agónica recuperación, así lo creo y así lo cuento.
¿Qué hacer hasta marzo?
Creo que generosidad y dar lo mejor de nosotros a familia, trabajo y amigos serán las mejores medicinas, sin duda; esta mezcla es letal contra cualquier crisis, porque el ser humano es capaz de lo peor y de lo mejor, en este experimento social veremos de qué somos capaces.
Toca vestirnos con el traje de la humildad, el de la puerta pequeña, el del camino estrecho, el de ir por la luz y no por la oscuridad, el de dormir poco para trabajar mucho y bien, el traje de la moderación, el traje de la responsabilidad, ese es el traje que todos tenemos y está en la caja de “lo mejor de mí”, búsquela, usted también la tiene.
Poco más que decir, las nubes se cierran de nuevo, y en la tormenta que llega, aunque no será tan fuerte como la primera, algunas casas están muy afectadas de la primera oleada, así que, nos toca recoger a los que se van a quedar sin casa, y lo digo en el amplio sentido de la palabra, y por supuesto, cuidar la propia, por lo que pueda venir, porque puede que seamos nosotros unos de los que se queden en la estacada, esta crisis es bastante demócrata.
Vienen tiempo de amigos de verdad, de familia, de trabajo, pero también de renuncias, aunque no de dejar de soñar, eso nunca, soñar e ilusión serán los combustibles para arrancar la maquinaria allá por marzo del 2021, y luego, seguir viviendo, como no.
No estoy triste, solo atento, pero me estoy preparando para el segundo impacto.
Buena semana