Hoy estaba Segovia hasta arriba de turismo, parece que hay dos vidas, la de la tele y la real, es curioso, todo el mundo con sus mascarillas, y como siempre, la zona del Acueducto llena de turistas: individuales, parejas, familias, etc…

La lección de hoy es sobre el tráfico natural y el tráfico buscado. En el Mesón de Candido, emblema de la gastronomía castellana, había cola, como casi siempre, y curiosamente, a menos de 10 metros y como ven en la imagen, había cazadores de turistas, esas personas que solo habíamos visto hasta ahora en la costa ofreciendo menús de buen precio en las esquinas y zonas transitadas.

La conclusión es que siempre podemos hacer cosas distintas, pero claro, si nos quedamos sentados esperando que se llene el Mesón de Cándido para llenar nosotros, poco podemos hacer, así que felicidades a todos aquellos que se atreven a hacer cosas distintas en momentos distintos.

Si tenemos que caer, es mejor caer hacia adelante y haciendo cosas, siempre aprenderemos algo. Venimos desnudos y nos vamos igual, así que divirtámonos por el camino y ayudemos con nuestro talento a todos los que podamos, porque ayudar, siempre es negocio, hacer lo que otros no quieren hacer, siempre es negocio.

Buena semana